Cómo tratar adecuadamente la artrosis de rodilla

La artrosis se refiere a procesos patológicos degenerativos en los tejidos articular-cartilaginosos, seguidos de su adelgazamiento y destrucción. La artrosis se caracteriza por capacidades motoras limitadas y dolor intenso. El tratamiento de la artrosis de la articulación de la rodilla o gonartrosis es bastante multifacético, porque existen muchos métodos terapéuticos antiartrosis eficaces: medicamentos, cirugía, dieta, masajes, etc.

Cómo y por qué se desarrolla la patología.

La gonartrosis se desarrolla por las siguientes razones:

  • Daño al menisco, que puede provocar el bloqueo de la rodilla. Las estadísticas muestran que los pacientes a los que se les extirpa un menisco desarrollan artrosis de rodilla en el 90% de los casos;
  • Otras lesiones como esguinces, fracturas, grietas, contusiones, etc. Este factor se presenta con mayor frecuencia en pacientes jóvenes;
  • La obesidad provoca una mayor carga sobre las estructuras articulares, especialmente las rodillas, ya que todo el exceso de peso ejerce presión sobre las extremidades inferiores. Y si, además de la obesidad, el paciente también tiene venas varicosas, existe una alta probabilidad de desarrollar una forma grave de gonartrosis, que es difícil de tratar;
  • Mayor carga en las rodillas, típica de deportistas, cargadores, etc.;
  • Procesos patológicos articulares como artritis, etc.;
  • Trastornos metabólicos;
  • Estrés, hipotermia.

Síntomas de artrosis de rodilla.

La artrosis tiene las siguientes manifestaciones sintomáticas:

  1. Acumulación de líquido en la cavidad articular, que conduce al desarrollo del quiste de Baker;
  2. El dolor al principio es débil e intermitente, pero con el desarrollo de procesos patológicos se vuelve intenso y constante. Además, el proceso de dicha transición puede durar varios años, hasta que aparezca un factor que provoque una exacerbación;
  3. Crujidos en la rodilla, que causan dolor. Un síntoma similar aparece ya en la segunda o tercera etapa del desarrollo de la gonartrosis;
  4. La movilidad articular deteriorada se manifiesta por la incapacidad de doblar la extremidad y el paciente experimenta un dolor intenso. Paralelamente se desarrolla una deformación articular, que es visible sin necesidad de dispositivos especiales.

Grado de desarrollo de la patología.

La gonartrosis se caracteriza por tres grados de desarrollo. El primer grado se caracteriza por la presencia de un ligero dolor durante la actividad física. En esta etapa, puede desarrollarse sinovitis con mayor formación de quistes. El daño del cartílago articular no se nota desde el exterior, pero ya se ha activado y va ganando intensidad poco a poco.

Al realizar un movimiento de flexión, los síntomas de dolor pueden complementarse con un crujido específico. Este signo se considera específico de la artrosis de rodilla.

Con la gonartrosis de segundo grado, el espacio articular se estrecha, lo que es claramente visible en la radiografía. El tejido óseo comienza a crecer. Cualquier movimiento, incluso leve, de la rodilla provoca un dolor agudo. Estos síntomas desaparecen rápidamente después de un breve descanso, pero después de la siguiente actividad vuelven a aparecer.

Un signo típico de gonartrosis de tercer grado es una deformidad notable de la rodilla. Además, ya no es posible deshacerse del dolor deteniendo el movimiento, porque el dolor está presente incluso en un estado de calma.

dolor en la articulación de la rodilla debido a artrosis

Enfoque del tratamiento de la artrosis de rodilla.

Las tácticas terapéuticas complejas pueden resolver los siguientes problemas:

  1. Fortalecer los músculos que sostienen las articulaciones, aumentar la elasticidad y flexibilidad de los tejidos de tendones y ligamentos;
  2. Deshacerse de los síntomas del dolor;
  3. Acelerar los procesos de recuperación y mejorar la nutrición en las estructuras cartilaginosas de la rodilla;
  4. Normalizar el flujo sanguíneo en el área afectada;
  5. Incrementar la movilidad articular;
  6. Reducir la compresión en la zona afectada;
  7. Aumenta la distancia entre los huesos.

Los procesos de tratamiento se basan en la prescripción de medicamentos, cirugía, dieta especial, procedimientos fisioterapéuticos, ejercicios terapéuticos, etc.

Drogas utilizadas

El tratamiento de la artrosis de la articulación de la rodilla se basa en el uso de medicamentos que proporcionan un tratamiento sintomático y detienen la progresión de la gonartrosis. Los fármacos antiinflamatorios no esteroides, los fármacos hormonales y los condroprotectores se adaptan bien a estas tareas. Estos medicamentos alivian eficazmente el dolor, pero están contraindicados para su uso a largo plazo para evitar el desarrollo de reacciones secundarias no deseadas. Por lo tanto, la duración del tratamiento con AINE no debe exceder las 2 semanas.

Entre los medicamentos hormonales que a menudo se recetan para la gonartrosis, merecen atención los siguientes:

Los medicamentos hormonales se prescriben en los casos en que los AINE no hacen frente al proceso patológico. Pero la terapia hormonal se caracteriza por una gran cantidad de efectos secundarios, por lo que no dura mucho.

Los fármacos condroprotectores restauran las funciones articulares con bastante eficacia. Estos medicamentos tienen un efecto complejo: reducen los síntomas del dolor, estabilizan los procesos patológicos y proporcionan una mayor nutrición al cartílago articular. Existen los condroprotectores más nuevos que, además del efecto de restauración del tejido articular, también están dotados de un efecto antiinflamatorio.

Operación

En ocasiones es necesario un tratamiento quirúrgico. El tratamiento de la artrosis de rodilla es posible mediante varios métodos quirúrgicos:

  1. Artroscopia;
  2. Endoprótesis;
  3. Osteotomía.

La opción más sencilla para la intervención quirúrgica es la artroscopia, durante la cual las zonas afectadas de la articulación se extirpan mediante pequeñas punciones.

El objetivo principal de la intervención artroscopia es prolongar la funcionalidad y rendimiento de la rodilla afectada por artrosis.

Pero el método quirúrgico más definitivo es la endoprótesis, que consiste en sustituir la fracción articular de la rodilla por un implante artificial. La efectividad de esta operación es aproximadamente del 90%. En cuanto a la osteotomía, esta operación implica realizar una fractura artificial, tras lo cual se fija el hueso en la posición anatómicamente correcta.

Fisioterapia

Los procedimientos fisioterapéuticos también desempeñan un papel importante en la terapia antiartrosis compleja. Facilitan el curso de la gonartrosis, eliminan el dolor, alivian los espasmos del tejido muscular y acortan la duración de la regeneración. Y si se utiliza electroforesis con el medicamento, entonces se reduce la dosis de este medicamento para el paciente cuando se toma por vía oral.

Los objetivos de los procedimientos fisioterapéuticos para la gonartrosis son eliminar el dolor, reducir la gravedad de los signos sintomáticos, acelerar la regeneración articular y mejorar la nutrición de la articulación dañada.

La irradiación ultravioleta y la magnetoterapia se utilizan para aliviar el dolor. Para eliminar los procesos inflamatorios, se prescriben terapia con láser infrarrojo o procedimientos de tratamiento UHF. Además, están indicadas la ecoterapia, la darsonvalización y los baños medicinales.

Terapia dietética

El éxito de las medidas terapéuticas contra la artrosis está determinado en gran medida por una dieta adecuadamente formulada. ¿Por qué? En ocasiones, la causa de los procesos de artrosis son los trastornos metabólicos, en cuyo desarrollo juega un papel importante la mala alimentación.

Una dieta desequilibrada conduce a la obesidad, lo que aumenta la tensión en las articulaciones de la rodilla. Por eso se recomienda seguir una dieta durante y después del tratamiento de la gonartrosis para prevenir la patología articular.

La dietoterapia para la artrosis de rodilla se basa en el consumo de alimentos enriquecidos con compuestos fortificados y microelementos esenciales. Al mismo tiempo, es necesario controlar el contenido calórico de los alimentos que ingiere para evitar kilos de más. Si tiene sobrepeso, se recomienda gastar más calorías de las que consume, entonces su peso corporal volverá a la normalidad.

Terapia de ejercicio

El tratamiento terapéutico y gimnástico se considera, con razón, uno de los elementos principales del tratamiento complejo de la gonartrosis. La realización de ejercicios ayuda a fortalecer y restaurar la actividad articular. Lo principal es realizar los elementos de forma suave y lenta. Ejercicios populares:

  1. Acuéstese boca abajo. Levanta las piernas una por una;
  2. Desde una posición de costado, levante la extremidad con un retraso de varios segundos;
  3. Desde una posición boca abajo, levante las piernas y realice movimientos de abducción y extensión.

¡Atención! Este ejercicio está contraindicado para pacientes hipertensos y otros pacientes cardíacos, porque provoca un aumento de la presión arterial.

Es útil realizar un masaje de fricción en la dirección desde la articulación de la rodilla hasta la articulación de la cadera. El masaje finaliza acariciando la piel.

Metodología de un reumatólogo.

El método de tratamiento de la gonartrosis según el programa de un reumatólogo se basa en el uso de fisioterapia junto con la terapia con medicamentos:

  • Tomar AINE;
  • Fármacos condroprotectores;
  • Medicamentos tópicos para aliviar el dolor, como ungüentos y cremas;
  • Infusiones inyectables en la articulación;
  • Procedimientos terapéuticos manuales;
  • Fisioterapia;
  • Actividades físicas ligeras.

Como resultado del uso de esta técnica, se restablece la movilidad anterior, se normaliza el suministro de sangre a la rodilla afectada, se alivia el dolor y las células de la articulación reciben una mayor nutrición.

técnica del autor

Esta técnica patentada tiene propiedades terapéuticas únicas. Este programa puede salvar a un paciente de la artrosis sin el uso de cirugía ni medicamentos. Esta técnica es una mezcla de métodos de tratamiento de fisioterapia y kinesiterapia. Cada paciente recibe un régimen de tratamiento privado y un programa de entrenamiento.

No se recomienda el uso de analgésicos para el paciente, ya que este problema se puede solucionar fácilmente aplicando hielo en la rodilla y una ducha de contraste. Como resultado del entrenamiento regular según el método:

  1. El paciente se alivia del dolor;
  2. Las articulaciones óseas, las articulaciones y los cartílagos comienzan a recibir una mayor nutrición;
  3. Se restablece la funcionalidad anterior de la rodilla.

Estas clases se llevan a cabo bajo la supervisión de un instructor experimentado en clínicas especializadas. Como terapia adicional están indicados masajes, natación y sauna.